lunes, 2 de febrero de 2015

La D.G.T a su servicio

Nieve… la que nos cayó ayer.




Paisajes bonitos… los que rodeaban ayer a Medina.
Y miedo… el que pasamos volviendo a Bilbao: carretera sin ningún cuidado en medio de una copiosa nevada, que llevaba todo el día, quitanieves sólo en dirección contraria (o sea, en la que no había tráfico), hielo, patinaje sobre ruedas, coches en la cuneta… Casi dos horas para hacer 40 kilómetros (en el resto no había nevado).
La de veces que he visto yo guardia civil de tráfico en esa carretera (Bilbao-Medina). Este pasado fin de semana había alertas, avisos… Lo que no había era nadie que ayudara a los automovilistas. Y eso que hice el viaje tanto el sábado (ida y vuelta) como el domingo (sólo vuelta).
Menos mal que no conducía yo (mi coche se quedó aparcado en Medina), porque en caso contrario el atasco hubiese sido de campeonato.
Al llegar a casa me esperaba la notificación de una multa por exceso de velocidad, en esa misma carretera, en otra fecha. Aquel día (hace apenas 15) hacían –digo yo- caja para poder protegernos mejor cuando hay que hacerlo ( o sea, ayer).

Como siempre, soy muy capaz de distinguir entre los trabajadores (¿1.000 € de sueldo?) y los que organizan el trabajo-servicio (¿un poco más de 1.000€ de sueldo?). Hacedlo también vosotros. Que no nos engañen.

No hay comentarios:

Publicar un comentario