viernes, 31 de mayo de 2013

Día mundial sin tabaco


“El padre de Blancanieves” es una novela difícil. A veces, las explicaciones científicas son excesivamente prolijas y dificultan su lectura.
También es difícil porque maneja una gran cantidad de “cultura política y sociológica”: por allí aparecen anarquismo, marxismo, capitalismo, comunismo, democracia, ecología, asambleísmo,… Complicado.
“El padre de Blancanieves” es una novela dura. Creo que es una novela abierta a la esperanza, a la posibilidad de que las acciones individuales llevadas a  cabo en el seno de una colectividad “revolucionaria” conduzcan a un mundo más habitable. Pero sólo lo creo. Es tan duro el entorno de esa esperanza (es tan real, habría que añadir, en la vida real), está expresado con tal claridad y radicalidad, que hasta resulta difícil saber de qué lado se coloca la novela. Si es que llega a colocarse de alguno (que quizás no importa).
En “el padre de Blancanieves” Belén Gopegui cuenta el interesantísimo periplo de Manuela, una profesora de secundaria, durante unos pocos meses. Pero, no es menos interesante la figura de su marido, Enrique, “el padre de Blancanieves” ese que nunca aparece en el cuento, pero que siempre estuvo allí.
Y luego están sus tres hijos: de diferentes edades, estudios, posturas ante la vida, peso familiar,… A ellos les acompañan unos cuantos jóvenes luchadores, ¿ecologistas?, que nos ayudan a ver distintos tipos de familias, tanto de origen como de propia construcción, distintos problemas sociales, políticos, familiares, sicológicos, sexuales, económicos,…
Una gran riqueza de mundo, de entorno para una anécdota escasa. Y (uno de vez en cuando lee estas tonterías) sin que yo haya detectado la aparición de un solo cigarrillo. A pesar de las asambleas, las cafeterías, los encuentros, las sobremesas,… ¡Curioso! Nada más que curioso.
Últimamente estoy descubriendo que hay muchas novelas sólo para adultos. Esta es una de ellas. Hipocondriacos, neuróticos, gente propensa al desánimo, inmaduros no críticos, faltos de criterio, y demás individuos altamente impresionables, absteneos de leerla.
Los que busquéis un relato con acción, buenos y malos, paisajes y tiempos climatológico o cronológico, podéis pasar de largo también.
Ahora bien, a los que os guste leer lo bien escrito, lo que casi se lee de tirón, sin aire para respirar, los que queráis pensar, discutir con vosotros mismos o con el de al lado, tenéis que saber que hay novelas que dan para un seminario literario, social, político y sicológico. Esta es una de ellas. Vosotros no os la perdáis.
Novelón.

La novela está llena de aciertos literarios, poéticos (si son distintos), sociales, psicológicos: os dejo alguna muestra para abrir boca.
“Hasta ahora los trabajadores siempre han acudido a su posibilidad de no trabajar, la huelga, la idea de que sin ellos todo se paraba.
Pero qué huelga va a hacer mi madre si se llevan su empresa.”
“Ella asume que su vida no está pensada, ni echada como la suerte. Tú dices que habrías preferido la estabilidad. Pero el mundo se mueve, Enrique, y eso no es culpa tuya ni mía”
“Un hombre sentado en el salón que, sin hacer nada, ve caer la última luz de la tarde parece un animal desconocido”.
“¿Por qué la referencia tiene que ser la perfección y no la vida? La perfección puede ser una posibilidad más, un dato más, pero no la referencia”
“Los militantes también deambulan, se desorientan y, ciertos días, anhelan irse de vacaciones de sí mismos”.
“Llamaron a lo que harían tratar de deshacer el reflejo condicionado, ese reflejo según el cual lo dominante se percibía como probable y aún como lógico; debido a ese reflejo condicionado no se percibía como amenaza la permanencia de un orden basado en el daño sino, absurdamente, el intento de modificar ese orden.”
“Y las cosas firmes no tienen cintura: se parten en dos.”
“Aquí, al margen de Benidorm, acaso nos aguarde un futuro de viejos y de viejas serenamente combativos. […] A esta edad (70 años) abriré algunas carpetas que no he de terminar pero espero que las terminen otros.
Madurar quizá consista en comprender que no es una quien ha de poner la firma al cuadro o cerrar el local y apagar la luz. Y ahora, cuando se que hay cosas que no voy a terminar nunca, rompo el reloj de arena, hago añicos el bulbo de cristal y mi arena ya no es mía sino parte de una playa. No se trata de liarme la manta a la cabeza.
Simplemente continúo”.

Y mañana, además de fin de semana, Junio. Pronto las vacaciones. El sol y el verano y el calorcillo ya veremos cuándo.

miércoles, 29 de mayo de 2013

31 comas etílicos. Viva el Ibilaldi


No se cuándo se celebró el primer Ibilaldi. Bastaría una consulta (o un par de ellas) para saberlo. Si sé que la de la primera vez que fui a hoy han pasado más de 20 años.
Desde entonces vengo diciendo (y conmigo otra mucha gente o yo con ella) que esa es una fiesta en la que el alcohol corre como los ríos en deshielo. Lo he visto con mis propios ojos hace ya mucho. Y no son sólo los txabales los que beben. Aunque también ellos, muchos de ellos.
Se decía entonces, y se seguirá diciendo hoy, que eso pasa en este país en todas las fiestas, que las ikastolas no tienen la culpa, que la culpa es de la sociedad en la que vivimos y que “bueno, no es para tanto, un día es un día”.
Pues respondamos: es una fiesta –dicen- que nace de la necesidad de mejorar la educación en este país. Educación no rima con coma etílico. Dinero, probablemente sí. Si para financiar la educación acabamos con la gente más joven (acabamos es mucho), la colocamos en situaciones bastardas,… retiraos de la educación.
La culpa la tiene quien la tiene, o sea, nosotros. De ninguna manera esos señores de Madrid o París. La culpa, digo, de que 31 personas (declaradas) lleguen al coma etílico en una fiesta.

Y que esto no es un día. Ya en mis tiempos había jaia de este mundillo durante 3 ó 4 domingos más o menos seguidos. ¿Cuántos son ahora?

martes, 28 de mayo de 2013

Cuidaos, por favor



No puedo decir nada aún del partido del Bilbao Basket porque, aunque ya habrá terminado, yo lo voy a ver tranquilamente dentro de un par de horas. El asunto de la “actualidad” inmediata de los hechos siempre ha sido un poco mentira.
Lo que sí es actual, y de lo que llevo unos días sin atreverme a escribir, es el ataque, mutilación y violación de la trabajadora social en Deusto hace unos días.
La primera reacción, visceral, es (fue) tan xenófoba, tan nazi, que preferí callar. Supongo que no sólo a mí me salió aquello de devolver a su casa (como si la tuvieran) a todos los “moros”.
Hoy es más fácil escribir (¡qué dolor de paradoja!), cuando en “20minutos.es” se puede leer que “abren un procedimiento contra Manel Comas por presuntos delitos de abuso sexual en 2008 contra dos chicas: una con discapacidad psíquica consistente en inteligencia límite y otra de 15 años con retraso mental madurativo ligero”.
Es más fácil escribir porque es mucho más claro que el juicio no depende –no debería depender- del lugar de origen del abusador-violador, sino de lo que ha hecho y a quien se lo ha hecho.
El problema del origen de semejante individuo es un problema de política exterior, de política de inmigración. Creo que no deberíamos permitir que cualquiera pudiera venir de cualquier sitio en cualquiera situación. Creo que no se nos debería permitir ir a cualquier sitio de cualquier manera en cualquiera situación.
Sí insistiré en lo primero que pensé (y que me perdone la trabajadora social víctima). Lo ha dicho luego mucha gente y antes, en circunstancias muy similares, lo hemos “predicado” algunos en ese lugar de trabajo al que se refiere el título de mi blog. Lo teníamos muy claro, algunos, cuando educábamos en Otxarkoaga: en situaciones que entendemos peligrosas (y no era muy difícil precisar cuáles) un trabajador, un educador, no debe estar solo con el presunto peligroso. Y menos aún si es una mujer.
Pero, también sabíamos dónde estaba el problema: no hay nadie más y me han llamado, han venido a verme, preguntan por mí,… Estamos los justos en este trabajo… No hay dinero para más contrataciones…
Cuidaos, por favor.

martes, 21 de mayo de 2013

Sólo para adultos


Escribí sobre “Mala hostia” (ver blog del 10 de enero). Acabo de leer otra novela de Luis Gutiérrez Maluenda: “Sólo para adultos”.
Ahí tenéis otra novela interesante, sugerente, de comparaciones-metáforas graciosas, exageradas y que muestran la personalidad, un tanto disparatada, del detective protagonista  (Basilio Céspedes "Humphrey"), al que se suma un ex-policía (policía de vocación), una “típica” secretaria y un par de personajes  sacados de cualquier esperpento.
Se trata de desentrañar el misterio contenido en un extraño suceso que hace el caso atractivo desde el principio: un hombre “despierta” sin saber quién es y con un maletín en el que se pueden contar hasta 400.000 euros, una par de bolsas de coca y una pistola. El es el primer sospechoso de la muerte de una telefonista echadora del tarot que cree que el mundo se puede arreglar aún.
Un par de textos:
“Me gusta vivir donde vivo […]. Como me contó el fulano que me alquiló el piso: “Tiene las mejores vistas de Barcelona, eso de ahí delante es el meublé más concurrido de la ciudad, solo que te sientes en el balcón a ver la cara de felicidad que pone la gente cuando sale, te ahorras el cine; ahí vienen a follar tanto las criadas como las señoras y si te haces amigo de alguno de los camareros y te cuentan las historias que ellos saben, también te ahorras un dineral en literatura, que al precio que se están poniendo los libros…” No me cobró suplemento por esas ventajas extras y se lo alquilé”.
“- De un ser noble te puedes fiar, de un idealista es muy discutible. El idealismo es un desatino que nos diferencia de los animales. Y la diferencia juega a favor de los animales”.

lunes, 20 de mayo de 2013

Reforma de la ENSEÑANZA



Parece obligado decir algo sobre la nueva “Ley de Educación”, la de Wert, o la del PP, o la de vaya usted a saber quién.
Pero me tropiezo con tres grandes dificultades: de entrada, cada día me suenan a más lejanos esos asuntos; por otro lado, todo lo que oigo (quizás estoy muy lejos de donde se dicen otras cosas) son apreciaciones políticas de la llamada “reforma”, de un signo o de otro (¿seguro que hay más de un signo?... sigamos admitiendo que sí), de un nacionalismo o de otro; y, por último, dudo mucho de la capacidad de las palabras, los pensamientos, las ideas, para cambiar algo de lo que los intereses creados de los de siempre nos va imponiendo. Cada día es más fácil y atractiva la “retirada al campo”.
Y, como no acabo de resignarme, creo que hay un par de cosas que aún puedo-debo decir.
Como muy bien decía el otro día la Letizia a propósito de la crisis (pero, ¿su lugar no eran las reuniones para tomar el té de las 5?): en esto del lenguaje hay mucho mamoneo. Comencemos, pues, por declarar que no se trata de una ley de “educación”, sino de “enseñanza”, que son dos cosas, si bien complementarias, muy distintas: a veces, opuestas.
Si fuera una ley de educación, nos importaría un comino si más religión o menos, si lengua de qué idioma, si cuántas mates, si los niveles se miden en dos o en seis reválidas,… o sea casi todo lo que se discute en los medios.
Si es una ley de enseñanza, ¡que levante la mano el que diga que no hay que pegar un gran repaso a todo el sistema! Ahora bien, los que dicen que han metido ese repaso casi con toda seguridad saben muy poco del asunto y ganan demasiado dinero como para dejarlo en manos competentes. Que empiecen por determinar (los que saben) los niveles exigibles para tener chavales preparados para enfrentarse a esa parte de la enseñanza que dirige hacia la universidad o hacia la empresa (o hacia ambas), para simplificar, y que midan los tiempos, los lugares, los momentos,… Ayudando, dejando, animando, potenciando a cada uno de los chavales, a cada centro, a cada grupo,…
Poco más puedo decir yo ya. Porque, además, ya todo lo que diga es pasado y desde fuera (aunque sea interesante). Pero, de momento, no me callaré del todo.
Así de bonito estaba el río el otro día, aunque no haga un tiempo ni soleado ni cálido:

Que no es más que la vida que va a dar en la mar.

jueves, 16 de mayo de 2013

Que lo sepáis



Mensaje de la Seguridad Social recibido ayer, 15 de mayo, a las 3 de la tarde:
“El INSS le informa: Su pensión de jubilación ha sido resuelta favorablemente”
Que lo sepáis.

martes, 14 de mayo de 2013

Premio Max

Ayer tuvo lugar la Gala de los premios Max de las Artes escénicas.
Por lo que a mí me interesa tendré que estar atento (una vez más) al Teatro de la Abadía.
Pero lo que quiero hoy es hacerme eco del grafitti que apareció sobre el último decorado de la gala. De cía así:
Hay cosas encerradas detrás de los muros, que si salieran de pronto a la calle y gritaran, llenarían el mundo.
Otra vez la voz de las paredes.

martes, 7 de mayo de 2013

Refrito

Permitidme hoy un pequeñísimo refrito (ya se que me falta todo lo de Mou), que podríais hacer cualquiera de vosotros y que no os aportará nada nuevo. Sólo quisiera ser uno de esos muros en los que el eco se repite y se multiplica hasta que la voz llega a todos los rincones. Quizás ésta se una de las virtudes de la Red:

La policía confirma las prácticas de financiación ilegal en el Partido Popular


La Audiencia de Palma anula la imputación de la infanta

"No hay indicios de que la infanta conociera el plan criminal de su marido"




viernes, 3 de mayo de 2013

Jubilación viene de júbilo



Se acaba una semana “agitada”. Supongo que se acaba bien, sin cerrar nada en falso. Es la primera semana de mi jubilación. Ya sólo dependo (económicamente) de papá-estado. Hasta hace unos días también dependía de mamá-iglesia-empresa.
¿Liberado? Un poco sí. Ya sé que desde fuera todo se ve con mayor claridad: “por ahí pasan todos los días un montón de trabajadores”; “¿qué problema puede haber?”; “todo irá como debe”; y bla,  bla, bla…
Pero hay que pasarlo y hasta que no vea mi primera pensión íntegra en mi cuenta no se acabará de cerrar definitivamente esta semana. Para eso queda casi un mes, pero antes habrá signos de que todo está bien encaminado: confirmación vía mensaje electrónico de la Seguridad social, finiquito de la anterior pensión…
Esta vez son mis “rollos” personales  los que llenan la entrada en el blog. Aunque no hayan dejado de pasar cosas alrededor, aunque haya habido un nuevo primero de mayo, una nueva reunión del Consejo de Ministros (que últimamente parece el lugar en el que se firman sentencias contra los que siempre han tenido razones para movilizarse los primeros de mayo), aunque el número de parados haya vuelto a aumentar, aunque en este País nunca nadie se ponga de acuerdo para nada, aunque los que gobiernan sigan mostrando su inclinación a la derecha; cuando se llega a los 65 hay que solucionar cosas “gordas” (ruptura contractual con la empresa; pensión con la seguridad social) y cosas “flacas” (la tarjeta roja para viajar en metro, la rebaja que hace euskaltel,…). A partir de ahora también puede ser más barato ir al teatro o a la ópera, viajar en renfe, entrar en museos, y unas cuantas incongruencias más, porque todas esas “rebajas” deberían depender de los ingreso y no de la edad. Mis hijos las necesitan más que yo, aunque ya se aprovecharán, ya.
Tengo dos dudas: no se si cambiar ya el nombre del blog y no sé si empezar a planear “jubilados sin fronteras”, Y una tercera: ¿hasta dónde podrá llegar el Bilbao Basket? No os adelanto mis previsiones porque ahora son muy pesimistas.
Buen finde… si consigo subir esta entrada a mi blog antes de mañana, porque como podéis ver en la foto el lugar es una gozada, pero de cobertura deja mucho que desear. (Definitivamente -cinco minutos después - os comunico que la foto la mandaré cuando llegue a Bilbao, porque aquí no sube)
Y como mañana hace un carro de años que soy aita, pues Zorionak, Jonan