A mi el fútbol me
interesa muy poco. Me gusta de vez en cuando ver a determinados equipos que
juegan “bonito”. El resto suele ser un aburrimiento inaguantable, aunque, lo
confieso, lo suelo aguantar en la tele, si juega el Athletic. No se por qué, si
yo a los 18 años dejé de ser socio del River por puro hastío.
También es cierto
que en la lectura diaria de la prensa entra el dedicar un rato a los deportes
con especial atención al Athletic. Debe ser algo así como “contaminación
ambiental”, algún extraño virus que lleva a interesarse por cosas que realmente
son insustanciales en la vida, en nuestra vida (las majaderías de Ruiz Mateos,
las sevillanas de la duquesa de Alba, los rifirrafes del primer ministro sirio,
el precio de las barracas cuando los niños se han hecho mayores, los problemas
de la batalla de flores de Laredo,
y otras mil).
A o que iba. Me he
tragado todo lo que va del culebrón-Martínez. El chaval (es un chaval) ha
fichado por el Bayern. Por fin empezará a acabarse esta telenovela de
amor-odio. Aunque quedan otras dos, por lo menos, que nos harán más llevadero el otoño.
Pero hay dos cosas
que a mi blog le vienen de perlas. Nada de perdérselas.
Una no hay ética
que la pueda soportar: este chaval va a ganar en una año lo que yo en 100. Y yo
ya no rindo mucho, pero tú que lees esto y que cuidas de la educación de los
niños, de tener sano al personal, de que los alimentos lleguen en condiciones
sin que se rompan las cadenas de frío, de atender a quien quiere comprar algo,
de fabricar con tus manos o tu mente las casas que luego habitamos o las
carreteras por las que transitaremos, tú que cuidas de un enfermo o limpias a
un discapacitado, es decir, tú que sí rindes, te lo tienes que comer… con
patatas. Él juega al fútbol, conduce el balón, marca al contrario,… y de su
juego se nutre la tele y nuestras escapatorias de lo costoso o duro de lo
citado arriba.
Y, luego, la
segunda cosa son las palabras del comunicado del club: “este club
entiende que es consustancial, esencial, para el proyecto Athletic que su
primer equipo sea la máxima aspiración deportiva para todos y cada uno de sus
jugadores". Viene a decir: el
Athletic es el culo del mundo, el no va más para cualquier profesional de esta
cosa, el final de cualquier expectativa y lo es porque es de aquí, para los de
aquí, con y por los de aquí. ¡Aldeanos!
A todos nos tira
la aldea. Por eso, quizás, es tan difícil ser ciudadanos.
Cambiemos de
tercio.
Hasta Savater ha
intervenido en la discusión sobre la subvención pública a los centros privados
en los que se hace discriminación por sexo.
Me pregunto yo:
¿dónde está el problema? Si se subvenciona a un centro por la enseñanza que se
imparte en él y parece demostrado que las chicas por untado y los chicos por
otro rentabilizan mejor los euros de la subvención y sacan mejores notas en el
informe Prisa, si eso es así,… ¿por qué subvencionan los centros mixtos?
Yo ya sé que tú y
yo, nosotros y nosotras (por una vez y sin que sirva de precedente) hablamos de
Educación, de Centros de Educación y en ese contexto la discriminación es una
dificultad añadida. Pero en los centros de Enseñanza, en esos … que no me
mezclen churras con merinas.
Hoy llueve a
rachas fuertes.
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