De alguna manera tenía que “celebrar” mi primera lectura en esta modernez llamada “e-book”, y aunque podría haber seleccionado alguna otra lectura, éste era un momento idóneo para recuperar dos “caramelos”: la lectura de obras de teatro no clásicas y un autor llamado Slawomir Mrozek.
Cuando no se sabe bien desde qué ángulo empezar el comentario de una lectura porque son muchos los posibles, es que uno ha leído algo muy interesante. Y eso me ocurre ahora. Me contentaré con ayudar a vuestros ánimos con tres pinceladas a modo de introducción.
Mrozek es un polaco nacido en 1930, que publica en 1964 “Tango”. No es su primera obra de teatro ni la última, pero sí es su primer gran triunfo y la que yo acabo de leer. Tango se representa por primera vez en 1964 en Belgrado, y en Varsovia en 1965.
Este es un pedacito de esa obra
Eleanor.- ¿Y qué pensáis hacer ahora con nosotros?
Eugenio.- Os devolveremos la dignidad. Sí, a vosotros, que formáis una sociedad destartalada; os convertiremos otra vez en seres humanos con principios.
Eleanor.- ¿A la fuerza?
Eugenio.- Si no hay otro remedio, a la fuerza.
Stomil.- ¿Qué quiere decir eso?
Eugenio.- La salvación.
Stomil.- ¿La salvación … de qué?
Eugenio.- ¡De vuestra maldita libertad!
Y para acabar una cita de María Debicz, que escribe así en la Introducción (os aconsejo que la leais):
“El drama empieza siempre que a un cierto Hamlet le da por ordenar el mundo”.
De rebote, Mrozek en ebook me ha servido para desintoxicarme de Juan Madrid, en papel, en “Cuartos oscuros”. Juan Madrid nunca me había gustado.
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